Destacar no es cuestión de suerte, es cuestión de estrategia. Y aquí es donde entra el branding, ese proceso que va mucho más allá de un logo bonito. En batela marketing somos creativos y especialistas en marketing, sabemos que construir una marca sólida implica entender los diferentes tipos de branding y cómo aplicarlos según los objetivos de cada negocio.
Hoy te contamos cuáles son los principales tipos de branding que existen y cómo pueden transformar la percepción de tu empresa.
Qué es el branding
Primero, es fundamental conocer exactamente qué es el branding y por qué es tan importante a la hora de hablar de una marca. También denominado gestión de marca, el branding es el proceso estratégico de construir y gestionar la identidad de una marca para crear una percepción positiva y distintiva en la mente de los consumidores.
Se trata de un conjunto de acciones relacionadas con el posicionamiento, el propósito y los valores de una marca. Su objetivo es crear conexiones conscientes e inconscientes con el público para influir en sus decisiones de compra. Es decir, se centra en hacer conocida y deseada una marca.
Para ello, existen distintos tipos de branding según el objetivo de la marca para hacerse reconocible en su mercado.
Tipos de branding que debes conocer
Branding corporativo
El clásico, el más conocido y el que toda empresa necesita. El branding corporativo se centra en construir y gestionar la identidad de la empresa en su conjunto: sus valores, misión, propósito, personalidad y tono de comunicación.
Ejemplo: piensa en marcas como Apple o Coca-Cola, donde su identidad va más allá del producto; hablamos de innovación, experiencia, estilo de vida.
Este branding es perfecto para aquellas empresas que buscan consolidar su reputación y generar confianza en todos sus públicos, desde clientes hasta inversores.
Personal branding
Las personas también son marcas. El personal branding es la gestión estratégica de la imagen y reputación de un profesional, líder o figura pública.
Ejemplo: Elon Musk, más allá de sus empresas, tiene una marca personal que impacta directamente en sus negocios.
Se trata de un branding ideal para empresarios, emprendedores, creadores de contenido o cualquier profesional que quiera posicionarse como referente en su sector.
Branding de producto
El branding de producto es una de las formas más conocidas de branding porque se hace para líneas de producto individuales y no para todo el negocio. Cada vez que una empresa lanza una nueva línea de productos, hace branding solo para esos productos porque puede tener una variedad con diferentes precios, beneficios y usuarios finales en mente.
Así, el branding de producto puede tener su propia personalidad, independiente de la marca madre.
Ejemplo: Fanta, que tiene una identidad mucho más juvenil y divertida que su empresa matriz, Coca-Cola.
Ideal para empresas con portafolios amplios o productos con públicos muy segmentados.
Employer branding
No solo se compite por clientes, también por talento. El employer branding trabaja la percepción que tienen los empleados y candidatos sobre la empresa como lugar para trabajar.
Como ejemplo, algunas empresas como Google o Salesforce invierten mucho en transmitir su cultura organizacional, beneficios y propósito.
Perfecto para organizaciones que quieren atraer, motivar y retener al mejor talento.
Co-branding o branding colaborativo
Dos marcas, un mismo objetivo: sumar fuerzas. El co-branding consiste en alianzas estratégicas entre marcas para potenciarse mutuamente y llegar a nuevas audiencias.
Ejemplo: la colaboración entre Nike y Apple con productos como el Apple Watch Nike.
Este branding es excelente para marcas que quieren ampliar su alcance, generar innovación conjunta o posicionarse en nuevos nichos.
El branding no es opcional
El branding no es solo diseño, es una experiencia que define cómo te perciben, te recuerdan y te eligen.
En nuestra agencia de marketing en Donostia, diseñamos estrategias de branding que conectan, inspiran y generan resultados. Contáctanos.